Clr. Natalia G. Lange

La carrera de Counseling es oficial y está aprobada en Argentina desde el año 1998. Cuenta con programas de 3 años y medio para obtener el título de Orientador del Desarrollo Personal, Counseling. Luego se realizan especializaciones; en mi caso realicé dos especializaciones, la primera de ella de 1 año de duración que me habilita para acompañar a transitar procesos de duelo, y la segunda, Psicología Social con una duración de 3 años, en la cual, observamos  al sujeto en situación con los otros y con él mismo dentro de la sociedad que habita y como es influenciado por el medio y de qué manera él influye dentro de ese mismo medio social.

Como profesional del Enfoque Centrado en la Persona (ECP), nuestro trabajo sienta las bases en la Filosofía Existencial, en la Sociología, la Antropología y en las corrientes de la Psicología Humanista, siendo nuestro principal exponente el Psicólogo Estadounidense, Carl Rogers.

No tenemos pacientes, sino clientes o consultantes; esto es debido a que los profesionales del Counseling somos facilitadores en la resolución de conflictos de la vida cotidiana, fomentando el desarrollo de las personas para que ellas mismas descubran su potencial y logren utilizarlo en la reestructuración de su necesidad actual.

Nuestro objetivo no es curar a nadie; el Counseling se corre del paradigma médico-terapéutico donde una persona es la que cura y otra es la que se encuentra enferma. El Counseling busca la autonomía plena de cada persona, sosteniendo y acompañando en la resolución de las crisis. Nuestra profesión es valorada dentro de grupos interdisciplinarios, donde la mirada sistémica entrega un enfoque más dentro de las diferentes y necesarias intervenciones.

Respecto al consultante, se espera que el mismo se responsabilice y esté dispuesto a revisar sus conductas y actitudes, sus ideas y creencias;  teniendo en cuenta sus tiempos y particular percepción y entendiendo,  que la construcción de cambios es necesaria para su propio bienestar.